Esta puntilla tiene su historia y como tengo tiempo os la voy a contar:
El verano pasado alquilé un piso a una familia vallisoletana (un matrimonio adulto con los padres de uno de ellos) y en sus horas libres alguna de las dos damas se entretuvo en hacer estos metros de puntilla que se olvidaron en el piso. Desde luego tenían muy mala memoria porque también se olvidaron de dejar en su sitio tres juegos de sabanas a estrenar de cama de 150cm.
Espero que la mala conciencia no les impida conciliar el sueño cada vez que se metan en la cama de su casa sabiendo que las sabanas esas tenían dueño.
Por supuesto que los llamamos por teléfono para reclamar dichas sabanas y comentar que se habían dejado la puntilla y unas gafas, pero de las sabanas no sabían nada y el punto no las interesaba demasiado.
De la rabia, mi primera intención fue tirarla a la basura pero luego me dije !que corcho! igual me vale para algo, y así ha sido.
Las borlas de colores las he hecho con hilo de algodón
Pues mira que bien te vino la puntilla. Lo de las sábanas puede tener una explicación lógica: igual que te desaparece un calcetín en la lavadora, pues te pueden desaparecer juegos completos de cama! jeje :D
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