martes, 28 de julio de 2015

pulseras a los pies



Tengo que confesar mi gusto por Paula Echevarria.
Me parece guapísima, tipazo, simpática, siempre me gustan sus estilismos y encima está casada con un cántabro de pro.

El año pasado hizo este post  con unas sandalias que me impresionaron.




 Por supuesto que me quedé con la copla para copiarlas.


Porque comprarlas ...... se me iban algo del presupuesto.

He tenido la inmensa suerte de encontrar estas sandalias en Primark (13 euros)


  y las  pulseras compradas en mercadillo ( 2 euros cada una)


 las pulseras se cortan a las medidas de las tiras.


Y rematarlas como se puedan (me han quedado muy chapuzas pero es que se me deshilachaban enteras) con la maquina de coser.


A partir de aquí, lo que queda es con la pistola de silicona pegarlas a la sandalia.


Aprovechando los cierres originales de hilo he hecho una especie de borlas.



 Luego he puesto dos pompones en los extremos de los cordones ...


Y ya tengo mis sandalias soñadas desde el año pasado.


Ahhh y me han costado:

29 euros




miércoles, 8 de julio de 2015

Operación renove



Os aseguro que si esto fuera una comunicación de FaceTime estarías viendo mi cara de satisfacción ante estas sandalias.

( Las de la primera foto no, las del final )

Tengo unos pies que todo me hace daño así que cuando encuentro un calzado cómodo lo uso hasta que ya me da vergüenza que me vean con él.

 Es el caso de esas sandalias, ya estaban destrozaditas pero seguian siendo cómodas.

También tenia un cinturón tipo fajin plateado que lo he deshecho y aprovechado la polipiel.



He recortado los trozos que necesitaba


Y he ido pegando piezas que tenia por casa


Esas cosas redondas las he rescatado de unos zapatos que han ido a la basura, que por cierto, también había customizado con ellas ( eran unos pendientes)


Los cordones son fáciles de hacer.


Todas las piezas van cosidas con hilo de pescar y reforzadas con silicona, solo hay que ir rellenando huecos

    
Preparados para el cambio....

  
He pegado por debajo otro trozo de polipiel para que los nudos de hilo de pescar no me rocen. 


Y la pieza ya acabada la he pegado con silicona caliente a la sandalia.



Con rotulador plateado he arreglado un poco los raspones feos pero no sé como disimular las marcas de los dedos en las suelas, ¿quizá con betún marrón?




He dado una nueva vida a mis sandalias y estoy contentísima. 

!Tengo una sonrisa tonta de felicidad!